Recuerdo cuando hace muchos años atrás corría por aquellas praderas y bosques llenos de verde y esplendor, cuando el tiempo era eterno y no importaba nada de lo que nosotros quisiéramos saber de él, solo dedicabamos los días a cazar y a disfrutar de la vida. Hubo momentos en los que simplemente la vida nos daba malos momentos, pero la sobrevivencia era lo primero. Recuerdo cuando me quede solo, era un lobo joven y temerario que no quería dejar la cueva de donde había nacido, pero me enfrente a lo desconocido, sentí por primera vez la libertad en mi pelaje, mientras corría hacia el atardecer rojo escarlata, sin embargo, también enfrente peligros, recibí heridas graves, y los vi, vi a los humanos que consumían la tierra, vi como ellos convertían todo a cenizas, incluyendo mi antiguo hogar. Ya no había más a donde regresar.
Decidí recorrer el mundo de cabo a rabo, había lugares impresionantes y me encontré con otros lobos, fuimos manada durante un tiempo, pero ellos fueron cayendo también poco a poco, el tiempo hacia mella en ellos. Caminamos en busca de aquel paraíso donde pudiéramos volver a como estábamos, a ser cazadores y a compartir el mundo con otros seres sin destruir, solo convivir. Pero todo término aquel día cuando el campo se acabó, y solo había ciudad, y como artista del engaño, como un mago, me mimetise con los humanos, me había convertido en uno de ellos, pero el sortilegio se acaba si me tocan, la verdad sale a la luz, y por ello muchos fueron mi comida. Trate de disimularlo, pero mi lado salvaje no disminuía.
De aquel hecho ya han pasado más de mil años donde he convivido con centenares de humanos, mis instintos ahora yacen dormidos en lo más profundo de mi. Deje de ser un lobo. Deje de ser un cazador, pase a ser solamente un perro que lamentablemente sus heridas constantemente sin sentir culpa por que otros están en peores condiciones.
En muchas ocasiones siento que sale de mi aquel lobo despiadado y como de un humano sin pensarlo dos veces, total ellos no me han dado nada que no me haya ganado con mi propio esfuerzo, ellos simplemente al igual que un predador incansable, devoran todo lo que se les cruza. Mientras que yo simplemente ruego por volver a ser el animal que era, aquel ser que estaba realmente libre a pesar de estar en una cueva. Quiero volver a gaia, quiero volver a mis raíces, quiero volver a ser ese lobo blanco se ojos amarillos que aullaba a la luna declarándole su amor, y volver a ser fiero e indomable...
Solo quiero ser un lobo otra vez...
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